13 jul 2022

Una cuestión de... tránsito.

 


Sin importar la sociedad o la civilización, siempre he sostenido que, lo que define a una persona: son sus valores (Morales); y no, su educación (Académica), su “status” social o riqueza. Sin embargo, algo interesante de los seres humanos son sus “complejos” (conscientes e inconscientes); y, cómo los mismos inciden en la conducta social. No importa si estamos en Latinoamérica, Europa, África o Norteamérica: hay inconductas similares en lo que se refiere al tránsito (En Asia: algunos regímenes hacen cumplir la ley con penas severas; otros, ni penas tienen). En pocas palabras, es una cuestión inherente al propio ser humano, y no a las sociedades. Dejando a un lado todo lo vinculado a las marcas comerciales (Posicionamiento y marketing regional= tecnología ofertada y calidad de productos), me centraré en asuntos vinculados a mi sociedad y mi país (República Dominicana, Centro del Universo… (Risa), es sarcasmo; salvo, para algunos conductores y conductoras que se creen los “dueños/as” de la calle.

Siendo objetivo, debo empezar por mi: debo llevar unos cientos de miles de kilómetros transitando en la vía pública (Entre tránsito pesado, asfalto, tierra, piedras, ríos, montes (Haciendo yo, los caminos)… sin una multa (Y no lo escribo por orgullo). Me han chocado varias veces; aunque yo, solo tengo de víctima, a una paloma que me cruzó por el frente a unos 100km/h (Tuve que sacarla de la parrilla… incrustada… RIP). Y, como con 16 años pensaba estudiar ingeniería/diseño automotriz: conozco suficiente de todo tipo de medio de transporte terrestre (Que es lo que me ocupa en este post). En fin, hay objetividad.

Comencemos por lo básico: los seres humanos somos iguales, somos personas. Que usted enseñe a manejar a su perro es asunto suyo. Lo interesante, es cuando un militar, policía, político o figura “pública” infringe la ley… eso, y la llamada al “Superior” (Familiar militar o policial)… por ahí, comienza el problema. En un mundo “ideal”: las personas respetan la ley; en la vida real: tienes un coctel entre sociópatas, suicidas al volante, complejos de inferioridad y omisiones adrede de la autoridad, que está llamada a velar por el cumplimiento de la ley. Y usted pensará que, por ser Rep. Dom., uno de los países con mayores niveles de accidentes automotrices fatales, nuestro tránsito es como un Rally Dakar diario… pero, no.

A resumidas cuentas, como muchos otros países latinoamericanos y asiáticos en “vías de desarrollo”: concepto desfasado, pero que, en “su época” sirvió de excusa para importar millones de vehículos enteros... y, por piezas; lo que, unido al crecimiento “vertical” de las ciudades, y al cambio de caballos y burros por motos y camionetas… y los “sindicatos” del transporte sumados a la política: nos dan un “Caos” 100% provocado con un solo objetivo: consumo e impuestos. Tenemos rutas buenas, malas  y “dakarianas” para todo tipo de transito urbano, rural, turístico, etc. Entonces, ¿Cuál es el problema del tránsito en República Dominicana? sencillo: Intereses.

Algo interesante de la pandemia, la falta de chips para los autos (Gracias a la minería de criptomonedas), el asunto del comercio internacional, las crisis nacionales, cambios políticos, la “guerra” provocada entre Rusia y Ucrania (Que no es guerra per sé, sino una lucha de intereses geopolíticos en la cual inocentes se han visto afectados en todo el mundo debido a economías “interdependientes”), es que ha aumentado la agresividad de las personas al volante, y la falta de supervisión del Estado al momento de hacer cumplir la ley… y, me refiero a cada país de este planeta que no tiene un sistema automatizado de multas o cuya economía interna no dependa de ellas (Saludos a España, entre otros, que hacen cumplir la ley de forma objetiva). Los países, solo buscan una palabra: “Recuperación”, entendiéndose como dinamizar la economía siendo “flexibles” para que la pandemia sea vista como “pasado”. Y si se pregunta qué tiene que ver el factor económico con el tránsito: la respuesta corta es: todo.

En una sociedad organizada (A nivel de respeto de la Ley), las personas transitan respetando las normas. En República Dominicana, y en muchos otros países existe la frase: “Hacerse el loco”; es decir, hacerse de la vista gorda en ciertas situaciones. Un ejemplo específico y real es: te levantas en la mañana enciendes el vehículo y al detenerte en el primer semáforo vez que 1 de cada 3 motocicletas no tiene placa (Identificación… y, quizás, ni licencia de conducir); o, que en un kilómetro, vez dos carros sin placa. Si bien, es un problema cultural (Desde los 80’s, traían motos en furgones por piezas y las ensamblaban aquí… evasión de impuestos, política, etc.), sumado a los robos y a la falta de educación vial (Creo que, un 10-15% de los accidentes en moto se producen por éstos transitar en vía contraria (Digamos que hipotéticamente: no tienen licencia y/o desconocen las normas de tránsito; y, hasta sin luces se transita de noche… con más peligro en zonas turísticas con cuatriciclos y… borrachos). Lo que me lleva, al aspecto médico: En República Dominicana, es más factible económicamente, para los centros médicos, amputar un miembro, que darle una rehabilitación; lo mismo, ocurre con las cesáreas y el parto natural… ojo, la clase médica a nivel de post pandemia, también se ha vuelto más agre$$$$iva… otro tema. 

En horas “pico” (De mayor congestión) es notoria la aglomeración de motocicletas que, ante la más mínima oportunidad, cruzan el semáforo en rojo (Y también, algunos automóviles), poniendo en peligro la vida de otros (Nota: el problema de éstos “nobles” ciudadanos es que, al ser impactados en una flagrante violación a las normas de tránsito demandan a la verdadera víctima de su imprudencia, y “tejen” toda una historia de que la otra persona fue el/la causante de todo… suerte por las Dashcams… hasta para los fraudes a las aseguradoras sirven. En fin, todas esas violaciones pasan frente a los ojos de agentes que, salvo que vean que los están grabando: se hacen los locos/as o, dicho de otro modo: les temen a los diversos sindicatos del transporte (Hasta tienen dos senadores en la actualidad… como en todas partes del mundo. Y, ni hablaré de multas fantasma, omisiones de la ley para el transporte público; o, de como afecta la lentitud o las dimensiones del transporte de carga en las vías, saturándolas; ni de las “paradas” (Compradas a los ayuntamientos) de los taxistas, que también se estacionan donde quieran, al igual que los dealers de vehículos y los “visitantes” de los edificios residenciales… obstaculizando todo ello el tránsito urbano. Por cierto, ¿Por qué al Ministerio de Defensa entran tantos vehículos en la mañana? Esa entradita por la 27 de Febrero es un 25-35% del problema del tránsito Oeste-Este de la ciudad a esa hora… en mi humilde opinión, los militares han de tener disciplina y respeto a las normas por encima de su rango, puesto, labor?

En fin, si usted coloca un transporte público deficitario, sumado a personas que vienen desde otras provincias o municipios a trabajar al Distrito Nacional; si les da facilidades de obtener vehículos (Motos, no pagan peaje) y una “Flexibilización” de las normas del tránsito, sumado a un transporte de carga obsoleto (Lento, viejo y… sostén económico de los gobiernos de turno)… se dará cuenta de que el transito en República Dominicana no tiene un problema de seguridad o de vías. Es, un caos ordenado, centrado únicamente en el interés y el dinero.  Por cierto, este viernes 15 de junio se vence (Veremos) el plazo para “regular” (Registrar) parte de los más de 2.6 millones de motocicletas registradas en la República Dominicana… hasta ayer, solo 555 mil lo habían hecho. El tema, merece su post. :D