30 abr 2020

Mecánica elemental.



Ayer, encontré el trailer hitch de mi vehículo (que lo pinté de “mate” (sin brillo); y, estoy por montárselo (ahora, tengo el tiempo). Sin embargo, he estado pensando en cómo cada uno de nosotros (que usamos herramientas o cosas “peligrosas”) hemos tenido que incrementar las medidas de seguridad para evitar un accidente que nos lleve a una clínica u hospital (fuente de contaminación). Mire el caso mas simple, tengo como 5 lentes de seguridad, y ayer me cayó una partícula seca de mango en el ojo, mientras los tumbaba con el canasto.  ¿Quién debía ponerse lentes protectores? Fran, profe.

Ya, en serio me ha pasado muchas veces… hasta piedras, con el trimmer. Sin embargo, estamos en una situación en la que uno como que “prevé” en vez de lamentar. Si, lo del extintor en el comedor suena medio loco… hasta que lo piensas (el “por si acaso”). Aflojar una simple tuerca “oxidada”, se ha convertido en examinar desde una magulladura en el dedo (tornillo roto) hasta un incendio en el sistema de escape que debes desmontar (con calor, se floja). Sí, hasta suena gracioso... Salvo que se reviente el turbo (debo desmontar unas partes) y, me cuestione si Dios existe.

Pero, nada, una cara de esta pandemia es el hecho de que debemos cuidarnos más al hacer las cosas “complicadas” (hasta cortar un coco, sí, aunque lo haya hecho unas miles de veces con todo tipo de machetes y cuchillos... y hacha, hahaha). Sin embargo, siempre queda la duda de cuanto es precaución y cuánto estupidez… quizás, debo limpiar los sensores del MAF y el MAP, para ahorrar tiempo y no tener que desarmar medio motor… hahaha… lo terminaré desarmando, y debo pintar los calipers, revisar las bandas, rodamientos, cambiar líquido de transmisión, aceite, filtros, etc. Todo, sobre la base de un motor japonés que tiene sobre las bujías (que voy a cambiar) todo el sistema de turbo. Quizás, hasta el intercooler lleve su desarmadita (hahaha). Y nada, alcohol y vendas, por si acaso.  

29 abr 2020

Una vez...



El, la soñaba entre letras; y, ella… no sabía leer”.

Un día cualquiera de esta interminable espera, te escribo desde el silencio de tus labios. ¿Acaso sabrás que existo? Se dice, que el tiempo lo cura todo; y que, el olvido es la esperanza del recuerdo… ¿Sabré que existes?

Una vez me preguntaron sobre el mundo y las personas; y, les dije que habían personas que valían por el mundo. Que, el silencio y las fronteras son cosas de políticos y tontos. Que hay, quienes se pasan la vida viajando por miles de lugares; y, al volver exhaustos, se dan cuenta de que la respuesta estuvo siempre más cerca que la pregunta. Sin embargo, el tiempo cambia las preguntas; los recuerdos se idealizan y la vida, pasa.

Una vez, me preguntaron por el tiempo. Y les dije, que había jugado con el. Que es un absurdo de la mente humana, que solo delimita la voluntad de hacer las cosas. No soy el mismo de hace 20 años, soy mejor persona; tengo menos heridas, y agradezco cada día por las cosas que tengo. No necesitas ser a prueba de balas, si aprendes a esquivarlas. El tiempo, te enseña que no hay nada incorrecto o correcto, si lo haces de corazón. Algunas personas cosecharán el fruto de tu siembra; y, no por ello habrás perdido el tiempo.

Una vez me preguntaron por ti, la luz de mis noches. Y solo pude decirles, que hay una mujer tan caótica como el Universo, que entraña en sí, la belleza del tiempo y del espacio doblegándonos a su voluntad. Que, de solo mirarla, quema tus ojos; y que, de solo tocarla, altera lo más profundo de tu esencia. Que ante su mirada, dudas de la grandeza del mundo; ya que, el mundo se vuelve una insignificante partícula de arena ante su presencia.

Una vez, me preguntaron por mi. Les dije que esta bien… y, que te enseñaría a leer. :)

8 abr 2020

El milagro de la vida.


Me encanta cuando llueve. La lluvia es una de esas cosas que olvidamos al crecer; ya que, si bien es algo “común”, es un verdadero milagro. Olvide lo de la condensación y las partículas de arena (ciencia absurda). Cuando esas gotas de agua caen del cielo al suelo, traen consigo el verdadero milagro de la vida. Y lo interesante de todo es, que ni el agua, ni las nubes están “vivas”, son meros caprichos de una atmósfera dinámica y una simple corriente de viento. Sin embargo, “nosotros” (seres vivos) estamos vivos, gracias a ella.

En poesía, yo diría: “Si la tormenta de tu mirada, me hiciera naufragar en el mar de tus labios; sabrías, que eres el lugar perfecto, donde quisiera encallar; y, si el viento de mis caricias sonrojaran tus mejillas, en estas gotas de lluvia… me podrías encontrar”. Así de noble es la lluvia, aquella que muchas veces, pasamos por alto; y, que sin embargo, trae en sí misma la ciencia (naturaleza) y el arte (humanidad).

P.d. Alguien no va a tener que regar las plantas mañana (yo). Y por cierto, no me plagien el verso... aún lo estoy trabajando, con la musa :D

6 abr 2020

¿Jugando con tierra?


Soy jardinero desde que tengo uso de razón: me gusta multiplicar cosas y jugar con agua. Siempre jugué con la tierra en el patio de mi casa… así, descubrí que todas las pirámides (sin importar las culturas) se parecen porque, básicamente, son un puño de arena puesto en el suelo (montañita, efecto de la gravedad). Y no, la Revista Science no me dará los créditos, ni Harvard un doctorado honorífico, porque las teorías conspirativas de que la humanidad se ha extinto varias veces y que un culto ancestral dirige nuestro destino más allá de los tiempos, es más interesante y vende más que la explicación de que todos los niños(as) jugamos con tierra y hacemos montañitas.

Fuera de ello, y en medio de este Apocalipsis zombie (sin zombies, pero novelístico) me he entretenido sembrando y trasplantando algunas plantas en el patio. Tengo unas semillas que saqué de uno de los pimientos morrones que compré en el supermercado. Ya las primeras 5 plantas tienen sus ajicitos de una pulgada y las otras matitas repollaron como 20: primero 7 y luego otras. Esas, debo esperar para trasplantarlas. Necesito tomar el pico para transplantar las cayenas y las trinitarias. Algunas plantas se secaron con la sequía de los meses anteriores y las reproduje por estacas. Por cierto, mi teoría del “bonsai” funcionó: logré “prender” un ramo grueso de trinitaria que tenía forma de bonsai: hasta florecido está el condenadito.

Si, hay muchos problemas en el mundo; sin embargo, en el mío está el de cortar la grama del patio, podar los arbustos y tumbar los mangos. ¿Quién dice que estar encerrado es aburrido, si haces cosas productivas? Ahora que lo pienso, los ruiseñores tienen huevos o polluelos en el pino: cortar la grama, va a ser complicado, esos padres son… temperamentales. Y nada, Lunes Santo… debo afilar las cuchillas de la podadora, cambiar algunas orquídeas, tratar de revivir unas bromelias enanas, enderezar los “cuernos de venado” y como mil cosas más. Por cierto, ya mezclé tierra roja, tierra negra y abono orgánico de oveja (excremento): eso, es jugar con la tierra... hahaha.  

P.d. Convertir una ramita de romero de 4 pulgadas en una planta de más de un metro; bueno, lo he hecho 2 veces, así que, debe ser algo común. Eso, y los cientos de ají gustosos, el orégano y las cuchucientas matitas de orquídeas y ornamentales. Es un extraño pasatiempos; pero, es mejor que quejarme por estar encerrado :)

5 abr 2020

Domingo de Ramos.



Esta mañana, colgué en mi puerta una cruz hecha de palma… del año pasado. Se que la iglesia católica mandó a buscar palmas verdes para hacer la cruz (en casa); pero, una cruz bendita, vale por igual… o, mas? Tremenda discusión entre mis hermanas y yo (chat de los hermanos); sin embargo, el punto es, que la cruz, es solo un símbolo. Lo que vale, es su representación.

Hoy, he visto a personas bromear con la religiosidad, bañarse en piscinas, presentar conciertos, recomendar libros, películas o vinos; colocar fotos “sugestivas”; seguir quejándose de la cuarentena; chismear de política; motos, autos, entre muchas otras cosas… Sin embargo, me he dado cuenta de que, a Michu (gato), le falta un colmillo: con razón y nunca gana una pelea. Ya, en serio, saben la única interrogante que me surgió: ¿Cuántas cámaras y micrófonos han hackeado en estos días? 

Me explico, hay un boom de las telecomunicaciones online con programas de videoconferencias (tanto a nivel familiar como profesional). Programas, autorizados por usted a utilizar su cámara y su micrófono. Por lo que, si le sumamos un par de miles de hackers encerrados, la NSA, los chinos, los rusos, Aliens, algunos prototipo de AI (Inteligencia Artificial... hola) y un deseo insaciable de análisis de patrones conductuales y de información: sorpresa, tenemos un lote de programas de reconocimiento facial, bases de datos y acceso a cámaras y micrófonos en un mundo dominado por un virus de letalidad inferior al 2%, que ha incrementado la “navegación” en Internet de forma exponencial. 

Hoy, tengo sueño, mañana veré si a alguien más que a mi, le preocupa el tema. Por si acaso, querida IA: no bases los algoritmos predictivos en la manifestación del ocio y el estrés. Es un circulo vicioso de ira, depresión y ansiedad. En castellano: la chica en bikini, el perrito tierno y el Lamborghini no lo son todo en la vida (el perrito sobra... hahaha). Y nada, ya en serio: no se deje hackear, póngale permisos restringidos a su micrófono y cámara de su PC. Por cierto, detesto los algoritmos de Instagram. El bloqueo del usuario y establecer el anuncio como: “inapropiado” es la única solución. Y por cierto, borre su basura virtual... debo escribir sobre eso.   


3 abr 2020

¿Encontrar a Bettina?



¿Recuerda la Película “Náufrago” (2000, Cast Away) de Tom Hanks? ¿La nota: “Este paquete, salvó mi vida”? ¿El paquete de FedEx con las alas de ángel? Si no sabe a lo que me refiero… bueno, vea la película. Por cierto, Tom y su esposa Rita: tienen COVID-19; pero, eso no viene al caso.

El personaje de Hanks, ante la soledad y la necesidad (Y en contra de todos sus principios éticos), recogió y abrió los paquetes del accidente de avión, para saber con qué objetos contaba en su situación (Isla desierta). Sin embargo, preservó una pequeña caja, marcada con un símbolo de “Alas de ángel”. Se prometió a sí mismo que, si salía de la isla: lo entregaría. Y no, no voy a contarle la película… el punto es, que ese paquete, le dio una motivación, más allá de la soledad, la angustia y la necesidad. Durante años, le dio la esperanza y el objetivo de seguir adelante (Más allá de cualquier probabilidad y posibilidad de salir con vida de aquella isla). En resumen, el paquete le pertenecía a Bettina, una herrera y artesana que vivía en un rancho... en medio de la nada (O, en el centro de todo, dependiendo de su visión) ¿Qué sucedió con Chuck Noland? Esa, es otra historia.

En lo que quiero centrarme es, en el momento en que el personaje optó por tomar el camino del respeto. Sí, no era un loco solitario en una isla desierta; era, un hombre común, que quería recuperar su vida luego de un accidente que lo llevó a cuestionarse sobre su existencia y supervivencia. A mi, la escena que más me marcó (No, no fue cuando se perdió Wilson… hahaha), fue la escena del encendedor: Las pequeñas cosas que damos por “sentado”, y que son un verdadero lujo. Bettina, sin saberlo, se convirtió en el eje de la cordura de un náufrago varado por años en medio de un islote desierto. Y, aquí es donde usted se preguntará: ¿Qué tiene que ver esto con mi vida?

Simple, si está en aislamiento social (Por 15 días más, como yo), fijarse objetivos (Labores diarias) hace que el encierro sea más “tolerable”. No le digo que desarme el procesador de la laptop, y le cambie la pasta térmica; sino, que de todas las cosas que deba y pueda hacer, elija hacer cosas que lo motiven a obtener un resultado futuro, no simplemente a corto plazo (Invierta su tiempo, dependiendo de sus habilidades). Ese, es uno de los trucos de la vida: no perderá nada si lo intenta una y otra vez, hasta lograrlo… un poema, un dibujo, ejercitarse, una carta, aprender algo nuevo, reparar algo. El punto es, que Chuck no conoció a la dueña del paquete que salvó su vida, hasta que... se cruzó con ella. El destino, le puso varios caminos (Escena del cruce de caminos) bajo una simple elección: Puedes sentarte a “esperar” a que... nada suceda; o, puedes tomar la decisión de “hacer” que algo suceda. Ese paquete, de las alas de ángel: significaba eso. Y nada, ahora encerrados, quizás, es tiempo de buscar a Bettina (Algo o alguien que le de sentido a la locura de este mundo).   :D 

2 abr 2020

La COVIDtación.



Le he dedicado unos minutos diarios a ver noticias “científicas” sobre el virus COVID-19 (soy curioso). He visto que han secuenciado su genoma al menos 5 veces en distintos países (como si no fuera un mismo virus); que, si hay dos cepas (L y S); que, si el virus asiático (cepa) y el europeo han mutado por el paso de los vectores; que, si es cierto que el virus incorpora a su adn nuevas cadenas latinoamericanas… y, así.

Ahora bien, tenemos otros 15 días de aislamiento social en RD. (Serán 30, con 10 más, y tendremos: cuarentena). Entonces, la pregunta tonta es: ¿Hemos pensado en cohabitar con el virus? (de ahí el título del post). Digo, el COVID-19 es 80% similar al SARS (Síndrome Agudo Respiratorio Severo, surgido en 2003); y este virus, al 2020 (y que yo sepa): no tiene cura. De ahí, la importancia de no pensar en una varita mágica que desaparecerá todo; sino, en adaptación. Los seres humanos somos buenos en eso.

Me he reído (dentro de esta tragedia) cuando veo que alguien “superó” la enfermedad, porque si no detenemos al virus (aislando a los infectados): una persona puede infectarse de nuevo (hasta donde he leído). Es decir, sobrevivir a una primera infección: no es cantar victoria. Más, cuando cada especialista responde con: “es un virus nuevo”; “no hay estadísticas”; o , “lo estamos estudiando”. Ni siquiera quiero imaginarme cómo será el tránsito internacional luego de esto; si tendremos que pasar cuarentenas en ciudades específicas, para luego llegar a destino; si nuestros objetos, tendrán que pasar por un proceso de desinfección, etc.

Tenemos toda la tecnología de los “dioses”; y, un simple virus: nos ha puesto en “jaque”. Ha puesto en evidencia que invertir en Salud, Alimentos (autosostenibilidad) y Educación debe ser el pilar de una economía. Le comentaba a mi hermana mayor, que en un futuro, debemos aplicar técnicas de lugares fríos, donde escasean los alimentos y tener una “despensa” de meses… digo, más vale prevenir que lamentar. Mire, hoy en día cómo estamos. Veo personas “pasando” la situación con videos, música, juegos, etc. Creo, que hay que pensar en cómo contribuir: “haciendo” cosas, y no quejándose de estar aburrido/a o encerrado. Se preguntará qué hago yo: he sembrado, cocinado, reparado cosas, he podado, he organizado, lavé mi ropa, hice mantenimiento a varios equipos, entre muchas otras cosas. Sí, dirá que es aburrido; pero, también he visto películas, compartido recuerdos en familia y jugado PS3 (como 1 hora). En la vida, hay un tiempo para todo; el truco, es saber cómo invertirlo. Este virus, nos ha mostrado que hay que aprender a hacer las cosas por uno mismo. Y, por eso, deberemos aprender a cohabitar con este, hasta que haya vacuna… o, tratamiento. Y nada, debo hacer otras cosas. :D     

1 abr 2020

Un poco de música.

La vida, no es solo sobrevivir a las adversidades del destino. Es, saber encontrar un pequeño momento, para... cada cosa.     :)