¿Recuerda la
Película “Náufrago” (2000, Cast Away) de Tom Hanks? ¿La nota: “Este paquete,
salvó mi vida”? ¿El paquete de FedEx con las alas de ángel? Si no sabe a lo que
me refiero… bueno, vea la película. Por cierto, Tom y su esposa Rita: tienen COVID-19; pero, eso no viene al caso.
El personaje de
Hanks, ante la soledad y la necesidad (Y en contra de todos sus principios
éticos), recogió y abrió los paquetes del accidente de avión, para saber con qué
objetos contaba en su situación (Isla desierta). Sin embargo, preservó una
pequeña caja, marcada con un símbolo de “Alas de ángel”. Se prometió a sí mismo
que, si salía de la isla: lo entregaría. Y no, no voy a contarle la película… el
punto es, que ese paquete, le dio una motivación, más allá de la soledad, la
angustia y la necesidad. Durante años, le dio la esperanza y el objetivo de
seguir adelante (Más allá de cualquier probabilidad y posibilidad de salir con
vida de aquella isla). En resumen, el paquete le pertenecía a Bettina, una
herrera y artesana que vivía en un rancho... en medio de la nada (O, en el centro de todo, dependiendo de su visión) ¿Qué sucedió
con Chuck Noland? Esa, es otra historia.
En lo que quiero
centrarme es, en el momento en que el personaje optó por tomar el camino del
respeto. Sí, no era un loco solitario en una isla desierta; era, un hombre común, que quería
recuperar su vida luego de un accidente que lo llevó a cuestionarse sobre su existencia y supervivencia. A mi, la escena que más me marcó (No, no fue
cuando se perdió Wilson… hahaha), fue la escena del encendedor: Las pequeñas
cosas que damos por “sentado”, y que son un verdadero lujo. Bettina, sin saberlo, se convirtió en el eje de la cordura de un náufrago varado por años en medio de un islote desierto. Y, aquí es donde usted se preguntará: ¿Qué tiene que ver esto con
mi vida?
Simple, si está
en aislamiento social (Por 15 días más, como yo), fijarse objetivos (Labores
diarias) hace que el encierro sea más “tolerable”. No le digo que desarme el
procesador de la laptop, y le cambie la pasta térmica; sino, que de todas las
cosas que deba y pueda hacer, elija hacer cosas que lo motiven a obtener un resultado futuro, no simplemente a corto plazo (Invierta su tiempo, dependiendo de sus
habilidades). Ese, es uno de los trucos de la vida:
no perderá nada si lo intenta una y otra vez, hasta lograrlo… un poema, un
dibujo, ejercitarse, una carta, aprender algo nuevo, reparar algo. El punto es, que Chuck no conoció a la dueña del paquete que
salvó su vida, hasta que... se cruzó con ella. El destino, le puso varios caminos (Escena del cruce de caminos) bajo una simple elección: Puedes sentarte a “esperar” a que... nada suceda; o, puedes tomar la decisión de “hacer” que algo suceda. Ese paquete, de las alas de ángel: significaba eso. Y nada, ahora encerrados, quizás, es tiempo de buscar a Bettina (Algo o alguien que le de sentido a la locura de este mundo). :D
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