Y sigo aquí….

Bueno, en este último mes he estado estudiando "bastante". Gracias a Dios, mis neuronas no se han oxidaron por la edad, y sigo siendo el mismo “académico” maniático de antes. Pero, mi inscripción es a final de JULIO, y las clases comienzan en AGOSTO, así que aún tengo tiempo. Me he reído muchísimo porque "loco" al fin, sin haberme inscrito ya tengo el programa de las materias, el contenido, y hasta se mi posible tema de tesis. Y lo principal es que solo serán 2 o 3 días a la semana. Solo me falta ver en la biblioteca y en la copiadora el material existente.

Por cosas del destino, hace unos días me encontré con una muy querida amiga, colega y compañera de tesis quien, para mi suerte, ahora está tomando la misma Maestría, y me explicó como son las cosas (paz espiritual para mi cerebro). Lo que primero me dijo fue: “Aaay mi madre... y te sueltan unas preguntas que tu te quedas en el aire”… esas me encantan, digamos que funciono mejor con presión. Así que por ese lado todo está perfecto, salvo que me faltan algunos ajustes de sueño, ya que soy diurno, y como a las 10:00 P.M. ya estoy “cayéndome”, pero me adaptaré al horario.

Bueno, ¿por qué cerré el blog y ahora vuelvo y lo abro? Imagínese sentirse agobiado por estar en una serie de situaciones profesionales y sociales que no dependen de usted, sino de una serie de hechos aleatorios, los cuales usted debe acomodar a la mejor conveniencia para lograr el resultado deseado. Vendría siendo como esa sensación de que la solución más cercana está fuera de nuestro alcance, aunque sabemos que todos los elementos están frente a nosotros. Si algo he aprendido en esta vida es a confiar en mis instintos, la razón no siempre tiene las respuestas correctas, por lo que para organizar bien la mente, hay que alejarla del cuerpo.

Siempre doy gracias a Dios, porque me ilumina el camino en medio de la oscuridad. Me tomó solo quince días darme cuenta de que sigo siendo la misma persona de siempre, y el mismo estudiante mañoso; me di cuenta de que no he cambiado como persona; de que mis principios morales e ideales son incorruptibles, incluso para mí mismo. Me dí cuenta de que no necesito privarme de nada para seguir adelante. Para mi estrés profesional tengo mis Pesas; para el desahogo de mi alma, tengo mis poemas; pero, si no tengo mi blog, si no escribo… no tengo el derecho a escribir en otros blogs, es inaceptable para mi moralmente hablando, ya que no hay un equilibrio. No puedo ver un problema en otro y dejarlo pasar así como así. En mi vida me rijo por principios muy superiores a cualquier ley porque solo aplican para mi propia persona.

Este blog no se trata de mi, no se trata de mi forma de pensar o de ver el mundo, se trata de NOSOTROS, de todos y cada uno de los que dedicamos un pequeño tiempo a hacer lo que nos gusta: ESCRIBIR.

Quiero llegar al post 100 antes de cumplir el año (agosto), bueno, y antes de iniciar clases (Dios mediante), así que si alguna vez me vuelvo a agobiar, ya lo había dicho, “siempre vuelvo”. Vivo “conectado”, tal y como señalé al principio del blog: "esto es un vicio malo"; pero me equivoque, esto no es ni siquiera un vicio, es una excusa para COMPARTIR este tiempo. Así pues, queda abierto definitivamente El Atico, y el escritor se compromete a seguir dando lo mejor de sí en cada paso de su camino… salvo que me encuentre una mujer, me aloque y los deje botados a todos, en cuyo caso volveré igual.

"No es asunto de que aprendas a caer, es cuestión de que sepas levantarte".