Hoy, mientras saludaba a mi hermana menor que
había llegado a casa, noté que la puerta del frente estaba “entrejunta” y le
pregunté a mi mamá, respondiéndome mi hermana que mis sobrinos estaban en el frente jugando con un frisbee. Y claro, su tío tenía que supervisar…
Digamos que ellos están “perfeccionando” su técnica.
La chiquita, de 12 años, hizo 3 buenos lanzamientos… como de 200 intentos (parece un alien: flaca y alta). Y mi sobrino
mayor, de 17 años: ese, tiene esperanzas (Le gusta una vecinita del edificio del frente... quizás, por eso hacía tanto escándalo). Dado que mi sobrinita lo lanzaba para
todos los lados, pude apreciar el maltrato “ecológico” al que fueron sometidos
algunos árboles y plantas de mi casa (de qué me vale cuidarlos si me los
destruyen… es broma, solo fueron algunas hojas). En fin, su tío (yo) de
habilidad legendaria (en la vida real, no en el ciberespacio) les mostré cómo
se debía lanzar un frisbee para que cayera en las manos (sin moverse) del
contrario… (todo un arte) digo, ese es el reto; (tirarlo como loco y correr tras el: lo hace
cualquiera... bueno, eso hacía mi sobrino cuando lo lanzaba). A ellos les sorprendió la curvatura que hacía hasta alcanzar el
objetivo; Principalmente a la chiquita, quien parecía lanzar un disco romano (girando la espalda).
En resumen, "jugamos" (me tuve que quedar... casi me explotan el vidrio del carro) como dos horas y media, incluso, hasta
entrada la noche; y, entonces, en uno de esos tiros “imprecisos” de mi
sobrino, me tocó hacer contorsionismo entre espinas y, claro, me comenzó a doler
el trapezoide derecho (se me encogió, por retorcerme como gusarapo). Y mi santa madre comenzó a relajarme de que ese era un
deporte de niños, no de viejos (así los relajo a ellos). Pero, se me quitó a
las pocas horas. Sin embargo, le dije a ella que la experiencia: no se improvisa. Recuerdo que mis primeras canas fueron a eso de los trece años, hoy tengo cientos (a las mujeres le gusta... salvo que algunas "mayores" me tiran también el ojo). Sin embargo, hace unos días noté que tengo unas diez cien canas en la barba y dos en el bigote... algo nuevo; eso, debe ser la manifestación de la sabiduría (jajaja)... nota: un hombre serio JAMAS se tiñe el pelo.
Este día, me recordó cuando la amistad era pasar un buen rato de sano entretenimiento (sin electrónica), el amor estaba bien cerca (la hermosa vecina) y no había nada de qué preocuparse más de que el tiempo fuera "lento" (y nos cuidaban)... solo que, esta vez, quien cuidaba: era yo. Así termino los 12 posts de febrero... me quedaron algunos temas pendientes, ya los escribiré.
P.d. La imagen del perrito, es una representación del perro del edificio del lado. Estaba como loco por jugar; o, era, por mordernos (espero que nunca salte de la tercera planta... quedaría: irreparable).
Este día, me recordó cuando la amistad era pasar un buen rato de sano entretenimiento (sin electrónica), el amor estaba bien cerca (la hermosa vecina) y no había nada de qué preocuparse más de que el tiempo fuera "lento" (y nos cuidaban)... solo que, esta vez, quien cuidaba: era yo. Así termino los 12 posts de febrero... me quedaron algunos temas pendientes, ya los escribiré.
P.d. La imagen del perrito, es una representación del perro del edificio del lado. Estaba como loco por jugar; o, era, por mordernos (espero que nunca salte de la tercera planta... quedaría: irreparable).