27 dic 2015

The Revenant (2015).


Bueno, siendo sincero, la sinopsis de la película no me pareció nada del otro mundo. Sin embargo me senté durante dos horas y veintiséis minutos a verla. ¿Por qué? Por que tiene un cierto matiz histórico y antropológico de una época intermedia entre la modernidad y el salvajismo. Algo, que hemos perdido a nivel del séptimo arte; el cual, se ha enfocado hacia el aspecto comercial más que al cultural. Nota: No todo es zombies, Star Wars y... “dramas románticos”. Por cierto, la película Burnt (que debería traducirse como “sellado” y no como quemado. Diría que se titula así debido a la perfección a nivel de preparación gastronómica de un plato: correcto sellado de carnes), es una buena película a nivel de “amor por la cocina”… y no de amor por la “comida”. Una diferencia abismal que necesitará su propio post.

Claro está que no voy a contar la película The Revenant (lo más desagradable que puede hacer una persona). Sin embargo, hay que hacer algunas puntualizaciones del por qué esta película está bien realizada. En primer lugar, a líneas gruesas uno siente que está frente a un documental de NatGeo, debido al fuerte matiz que se le da a la naturaleza norteamericana tanto a nivel de otoño como de invierno; y, a las costumbres indígenas de la época que van desde la alimentación (cacería, preparación, etc.) hasta el curado de heridas y fabricación de cosas. Por cierto, solo quedan unos 2500-5000 indígenas Pawnees en la actualidad… en “reservas”. ¿Algún día tendrá Estados Unidos un presidente indígena? ¿Qué elimine las reservas, les devuelva SU tierra y sus derechos? Lo dejo hasta aquí, para que no me cierren el blog.

El segundo aspecto, no muy agradable para algunos es la cantidad de sangre derramada. Hay todo tipo de peleas desde “cuerpo a cuerpo” (me recordó a Gangs of New York”…) hasta la épica pelea con un Grizzly. Por cierto, en lo personal afirmo que Leonardo DiCaprio se aseguró un Oscar con esa pelea: copiaron cada detalle del comportamiento de una madre osa frente a un “peligro” para sus oseznos. Y su actuación en esta pelea estelar, unida a unos muy buenos efectos (no perfectos)… hasta a mí me dolió. Aunque de tanto dramatismo por dos veces DiCaprio empañó el lente de la cámara con su jadeo.

Me gustó la óptica filosófica del director: “Mantente respirando”, recuerdo que mantuvo vivo al protagonista para llevar a cabo su misión. Quizás, esa es la esencia de un “revenant” o “regresado” (del “mas allá”). Alguien a quien se daba por muerto, debido a las circunstancias de la época (con cualquier herida uno se moría, si no había medicinas o doctores cerca) y sobrevive pese a las inclemencias de la vida. La historia tiene un fuerte ambiente familiar y cultural. Se enfoca en una época en que los distintos grupos étnicos “convivían” bajo la conveniencia del trueque o el comercio que representaba el territorio de América del norte.

No me gustó la escena final de Dicaprio (mirando fijamente a la cámara, como un loco); aunque el sonido... lo dijo todo. El Director Alejandro González Iñarritu también se llevará sus premios. Nota: Deben llevar una carretilla a cada premiación, ya que, en vestuarios, sonido, ambiente, efectos digitales, escenarios, actores secundarios, etc., la película estuvo muy bien realizada. Y nada, solo espero jamás encontrarme con un grizzly en medio de un bosque... al menos, desarmado.

2 dic 2015

Clásicos de Navidad: Sobrinos/as.


Mi primera sobrina nació, cuando yo tenía once (11) años, a principio de un noviembre. Ya tenía la experiencia de primos (llevar coches, jugar); pero, lo primero que recuerdo era lo llorona que era esa cosita chiquita y gordita (mas, por el ruido de los fuegos artificiales…) Nota: recuerde que yo era como un Rambo, pero chiquito… lleno de fuegos “artificiales” y artilugios bélicos de patio (más peligrosos que el diantre), en una época en donde no existían restricciones de ningún tipo; y, lo cierto es que cada navidad: gastaba una pequeña fortuna en “armamento” navideño (fuegos artificiales de todo tipo).

Hablamos de dos décadas y media atrás, donde la única preocupación era no salir “rostizado”… porque quemado, era casi seguro. En fin, cuando mi sobrina primogénita cumplió su mes de edad, le tocó vivir una de mis mejores navidades: llena de fuegos artificiales “carabelitas” (hechos sin controles “oficiales”, por artesanos criollos). Ahora que lo pienso, era estúpidamente peligroso jugar con algo que podía matarte o arrancarte un dedo; pero, en vez de prohibirnos y esconder todo: se nos enseñaba a ser cuidadosos. Volviendo a “llorima” (por llorona), para esos días mi hermana (tercera de mayor a menor) se pasaba el día en casa, tomando los consejos de mi mamá. Y a mí, me había tomado con la manía de enterrar los “buscapiés” bajo la arena del frente: toda una obra de arte de demolición… quizás, por eso pensaban que sería ingeniero. Aunque perdí algunos G.I. Joe (traían goma a mitad del cuerpo y se partían a la mitad) La cuestión es que, esa navidad, por primera vez, se me pidió alejarme de la casa para no hacer ruido (por mi sobrina: la llorona). Suerte que su mamá consiguió unas orejeras… o seguiría llorando.

Un par de años después llegó mi segunda sobrina, hermana de la primogénita y ya para navidad ella tenía unos once meses de vida, a ella le encantaba ver las luces de colores… hasta que algo: explotaba. En ese caso se ponía roja y lloraba como por 10 minutos hasta que se le buscaba un biberón de leche (lo único que la calmaba). Para esa época, yo disfrutaba más sacando la pólvora de los fuegos artificiales que estaban “fallidos”, que haciéndolos explotar. La moda era escribir en la calle con pólvora y usar “garbancitos” para pequeñas marcas en las paredes (blancas) o el techo de las casas… y, claro, algunas quemaduras  “físicas” (la ropa nueva, quedaba como colador).

Así pasaron unos seis años, y nació mi primer sobrino varón, en un febrero; hijo de mi hermana menor. Y, dos meses después, mi otro sobrino varón, hermano de las dos mayores; por lo que, para navidad, ya tenía con quién jugar a los fuegos artificiales (eso, pensaba yo… eran más miedosos que las hembras y se les brotaban los ojos como chihuahuas). Aunque, la verdad, no contaba con que mis cuñados los cuidaran tanto. Recuerdo el trauma de ver a mis sobrinos jugando con “patas de gallina”, en una época en la que yo ya había construido mi bazuka de “varillas” (cohetitos pequeños que alcanzaban una distancia de 15-25 metros antes de explotar y dejar un zumbido en los oídos). En fin, con el paso del tiempo, todo lo que escuchaba era: “no compres de esos fuegos artificiales, que son peligrosos para los niños; aquellos de lucecitas son mejores” (no queman). Y yo, solo me preguntaba: dónde quedó la diversión. En esa época mi hermana menor solo me decía: “Recuerda que es mi único hijo”… su mayor logro, fue encender un par de cohetes pequeños en una botella (pero nunca se quemó, gracias a Dios y a su tío). Disfrutó tanto que desde esa época mi cuñado les compraba algunos (hasta que los “prohibieron”). Así nació mi quinta sobrina, su hermanita: la más chiquita y peligrosa del grupo. A ella le encantaba todo lo que fuera explosión: pero luego de la emoción, lloraba hasta ponerse como tomate. Sin embargo, tal y como he narrado en múltiples ocasiones, mis sobrinos (una bendición de Dios) me trajeron alegrías increíbles: con preguntas, ocurrencias, con juegos y con anécdotas navideñas que hoy son “leyenda”. Recuerdo la vez que los dos varones, con unos dos años se quedaron encerrados en Navidad en una habitación y tuve que romper el marco de la puerta para llegar a ellos (no cedió la cerradura)… no aparecía la llave y estaban llorando como locos. Todo fue un: “aléjense de la puerta”… nada que un poco de dulces no calmara. Por cierto, tuve que arreglar ese marco con una pieza nueva de madera, que sigue ahí, al día de hoy bajo la masilla y pintura.

Lo que es un clásico, de todo esto, es que hoy, mis sobrinas y sobrinos tiene sus respectivas parejas (los varones tienen casi mi tamaño) y cada navidad sale a colación alguna o varias anécdotas familiares de ellos en las que todo el mundo termina llorando… bueno, de la risa. Y nada, son esos pequeños momentos los que hacen de la vida algo especial.  Por lo que, solo les deseo una Feliz Navidad y un Próspero año Nuevo; y que, este tiempo sea compartido en FAMILIA.

P.d. En Noviembre: compré los regalos, instalé el arbolito y podé (por cierto, sembré las estacas y ya están repollando... eso es para el 2016). Algunos pendientes de Navidad que decidí tachar de la lista en este año 2015.  

20 nov 2015

El paso a desnivel de la Av. 27 de Febrero Esq. Privada.


Parece solo ayer cuando para poder ir al gimnasio pasaba tranquilamente (a pie) la Av. 27 de Febrero, esquivando solo a algún loco al volante que doblaba en “U”; o, alguien que desde el tercer carril de la derecha (en sentido Este-Oeste) quería doblar hacia la Av. Presidente Antonio Guzmán Fernández (conocida como la Av. Privada) ubicada a la izquierda; la cual, por cierto, solo consta de dos carriles en cada sentido.

Recuerdo que cuando se anunció la construcción de este paso a desnivel (meses atrás) solo me pregunté: “¿Cómo voy a llegar al Gym?”; ya que, dada la longitud de la obra, debía caminar al menos 300 metros extras a la derecha o a la izquierda para pasar al otro lado. Pero, debo reconocer que pensaron en las personas y al cerrar el “cruce” de vehículos, nos dejaron un pasillo a los peatones (incomodo, en cierto sentido, ya que evitaban el paso de motocicletas). Fue un poco preocupante luego de que las excavadoras comenzaron a perforar debajo de dicho “puente” (peatonal) y uno caminaba a unos tres pisos de altura sobre una estructura “aérea” construida sobre dos vigas de metal y revestida de tablones de madera; o, de madera comprimida (según avanzaban los trabajos) que se tambaleaban como el piso del Salón de la Corte Civil del Distrito Nacional (con los años uno se acostumbra a la oscilación del suelo). En fin, este paso peatonal cambió de lugar unas tres veces según fue avanzando la obra. Supervisada muchas veces (90% del tiempo) por la AMET (Autoridad Metropolitana del Transporte) quienes nos cedían el paso a los peatones, salvo sus respectivos pleitos con guagueros o chóferes de carros públicos que interrumpían el tránsito (descuidaban a los peatones). En esos caso, había que dar un salto de fe... y correr como loco, para poder cruzar “vivo”.

Hoy en día, la obra ha agilizado el tránsito de la 27 de Febrero hacia la plazoleta de la bandera. Sin embargo, hay salvajes que ocupan el “retorno” (carril izquierdo) en vez de tomar el carril derecho para permitir un mejor flujo de los vehículos. Nota: Deberían poner un oficial de la AMET que obligara a todo conductor que ocupe el retorno a devolverse, aún éste desee continuar en vía oeste-este por la 27: para que aprenda. Sin embargo, el motivo de este post no es la obra en sí, sino un efecto secundario: Los semáforos tienen una duración superior a los 90 segundos (llegando a 120, creo); por lo que, los vehículos que van a girar a la izquierda se acumulan en un tramo considerable. De ahí que, todo peatón que va por la margen “Norte” de la Av. 27 de febrero esquina privada, ahora se ve afectado de una mayor contaminación por Co2; algo que las autoridades deberían considerar es dar su “chequeo” de las emisiones en dicho lugar y/o reducir el tiempo del semáforo (para mejorar la calidad del aire); esto, sin contar de que ahora, uno debe pasar la 27 corriendo como un loco en sentido sur-norte y viceversa para no desperdiciar minutos de su vida… esperando a que cambie el semáforo nuevamente a rojo, para poder cruzar. Solo espero que mis pulmones se adapten a la contaminación “extra” para poder llegar al gimnasio a ejercitarme... algo irónico.  

7 nov 2015

Rambo vs Predator!!!



Quizás, usted se estará volviendo loco/a con el título del post. Pero, esta película no existe, y debo explicar mis motivaciones para referirme a la misma, antes de que la euforia se apodere de algunos fanáticos de la acción. Digamos que, todo comenzó cambiando canales en la tv, cuando de buenas a primeras me topé con una película de SyFy, llamada: “El tiburón de dos cabezas”; aunque, en la secuela, tenía tres cabezas. Creo que, algo vinculado a la Hidra (múltiples cabezas) hubiera sido más “innovador”, aunque hubieran tenido problemas de derecho de autor con “Marvel's Agents of Shield”, donde Hidra es una organización malvada. La cuestión es, que recordé la película: “Freddy vs Jason”, y se me ocurrió que no sería tan descabellado hacer una película titulada así: Rambo vs Predator (al margen de Alien vs Predator... un clásico, en donde ambos son "extraterrestres"); en vez de estas películas de Scifi, cuyos efectos y trama son tan predecibles como los días de la semana. Incluso con escenas trilladas, sería algo interesante: A ver...

Todo comenzaría en una jungla, un pueblo tranquilo a mitad de la nada en donde nuestro héroe “Johnny” (Rambo) se encuentra descansando, llevando una vida apacible, plenamente enamorado y con su pequeño hijo. Una noche cualquiera, se escuchan gritos, láseres, explosiones, tierra por los aires y muchos “cuerpos” que desaparecen. Luego, en medio de la oscuridad, vemos a Johnny empuñando su peculiar cuchillo militar con sierras y hoja de 12 pulgadas (aunque podríamos cambiar el tamaño por uno de 8 pulg o su machete)... y. con su particular mirada (de loco). En este punto, no sé si Rambo debe matar al más pequeño de los Predators (grupito de 3, según la saga); o, si éstos se enfrentan, lo hieren a él de gravedad y lo dan por muerto.

La cuestión es que amanece, Rambo aparece desmayado en medio de los escombros; el pueblo, está desolado, lleno de humo, cenizas, con algo de lluvia tenue... y, como usted sabrá: la mujer muere (siempre mueren con Rambo, no hay excepciones: así, añadimos la cinta roja o negra que usa en la cabeza: un recuerdo de por qué lucha). Y, claro está, el inocente hijo: está desaparecido. En eso, un anciano moribundo (o una sexy supermodelo, vestida de campesina y con la ropa bastante rasgada... Nota: no siempre debe ser un anciano/a moribundo, o el director de la película el que da las malas noticias), le dice que vio cuando se llevaron a su pequeño hacia la profundidad de la selva, donde: “nunca lo volverá a ver... jamás” (con esta frase recalcada: motivación). Momentos después, la escena en donde Rambo remueve las tablas del piso de su casa con el cuchillo y dentro de una polvorienta caja, saca algunas “herramientas” (de trabajo): una ametralladora con sus “tira” de municiones, el arco con sus flechas explosivas; quizás, un lanzacohetes, y algún que otro juguete nuevo: cosas explosivas. (Nota: no recuerdo jamás ver a Rambo con una pistola en mano, solo armas de “alto calibre”. Podría haber conseguido un calibre 50 con algo de visión nocturna, etc.; recuerde que va a enfrentar a extraterrestres cazadores, no a militares tercermundistas furiosos). En fin, este, sería el trailer…

P.d. Yo, pensaba que me haría rico con el guión (jajaja); pero, he Googleado el título (para buscar la imagen de arriba) y: desde hace años los fanáticos han planteado esta idea. Pero, bueno, lo cierto es que sería algo mejor que: el “Tiburón de 4 Cabezas”. Aunque, siendo sincero, solo he visto el avance del tiburón de 3 cabezas (no la película)… y, no me gustaron para nada sus efectos gráficos: 100% falsos… aunque quizás, lo hacen para que los niños sepan que es algo irreal. Como cuando en los 90’s, los actores “muertos” en una escena: movían un ojo, al final... para saber que era de mentira. En fin, hay que saber en qué se invierte su tiempo frente a un televisor: no todo es mecánica, carreras, monster trucks, Rallys, etc.     

25 oct 2015

A mis 37.


Con los años, nos llegan nuevas responsabilidades. Familia... amigos... trabajo... trabajo... y, trabajo. Pero, lo cierto es, que cada momento de la vida tiene su propio encanto y su propia motivación. Y, no se trata de ser mas fuerte, mas ágil o mas "inteligente" que otros. Se trata de cómo nuestro mundo cambia para adecuarse a nosotros mismos. Digamos que, la vida tiene tres caminos básicos, y no importa cuál de ellos usted tome, llega el momento en que reflexiona sobre: lo que tiene, lo que necesita y lo que anhela (o sueña). No lo niego, esas tres variables confluyen, se separan, y... hasta se mezclan. Pero, en esencia, la experiencia es lo que nos define y define nuestro rumbo. Y esa experiencia solo se logra: viviendo (sin comillas).

Algunas personas comenten mil errores para llegar a un solo logro; otras, lo logran: al primer intento. Algunos, se desesperan por cosas que no necesitan, que no controlan y que no comprenden; otros, agradecen lo que sea que la vida les envíe... aún sea, un simple gesto. Vivimos en un mundo de sueños, que se desintegran para forjar nuevas ideas, nuevas metas y nuevos logros, que nos empujan por un camino sin retorno: la vida. Es, literalmente, una sinfonía de sentimientos e ideas que buscan organizarse hacia la materialización de algo muy simple, llamado: voluntad.

La voluntad, nos forja. Nos mantiene incólumes ante la negatividad y el pesar de una realidad cada vez más pesimista de guerras, destrucción, corrupción. Pero eso no es nada, en comparación con el desastre que significa: "crear un mundo, y encerrarte en el". Y es a eso, a lo que aspiran muchas de nuestras sociedades modernas: a mentes abrumadas por el consumo, por la competencia, por el miedo. Y yo, me pregunto: ¿Por qué no podemos abrumarnos por hacer a otros felices? (familia), por evitar que comentan nuestros errores (amigos); ¿Por qué no podemos aspirar a un mundo de igualdad y libertad sin un "control" internacional? (existencia, plenitud)

¿Acaso una idea revolucionaria para acabar con las enfermedades con el hambre y con la pobreza extrema del mundo, no merece más oportunidad que el control de la "temperatura" del mundo o el mercado petrolero? He avergonzado a cientos de personas en sus diferentes áreas, por hacer cosas que se supone no se podían resolver, y tan solo soy un tipo ordinario. Entonces, ¿Por qué limitar la sed humana por progresar, orientándola hacia una cultura transnacional de "zombies come tecnología" (consumistas), en vez de incentivar la creatividad e innovación?

Las personas buscan amor, felicidad, progreso; pero, pasan su vida trabajando como esclavos, descuidando a su familia, e hipotecando su futuro. Buscan vivir de las apariencias, compitiendo con sus "amigos" y familiares; para luego, acabar en el mismo lugar en donde comenzaron décadas atrás. Gracias a Dios, y a todo lo que he aprendido en estos 37 años, estoy seguro de una cosa: no cambiaría nada de lo que he hecho hasta ahora. Por qué, porque en algún punto de mi vida aprendí a hacer de mi vida algo personal, aprendí a doblegar el tiempo (sin luchar contra el), aprendí a dar lo suficiente para lograr las cosas, pero guardando lo mejor para mi; aprendí a creer en las personas, cuando ni siquiera ellas lo hacen; aprendí a que las sombras son solo una prueba de la luz; aprendí que lo que hace hermosa a una mujer no es su apariencia, sino sus gestos; aprendí a enamorarme de esos detalles únicos que la hacen única; aprendí a tropezar, y a levantarme sonriendo; pero, sobre todo, aprendí que nosotros merecemos tantas oportunidades como necesitemos para llegar hacia nuestro fin supremo: vivir nuestra única vida.

Y nada, todas estas tonterías son solo las incoherencias de un hombre de 37 años con mucho sueño (son las 11:50 p.m.; y yo, soy diurno), quien se auto felicita por su cumpleaños con una simple frase: "confía en tu instinto, aún no ha fallado". (risa implícita)

10 oct 2015

Una cuestión de... reemplazos.





Tengo la arraigada costumbre de durar una década con los autos. En ese tiempo, pasan muchas cosas... y, muchas anécdotas. Hace unos días, me tocaba cambio de bujías, líquido de transmisión y filtro de aire (mantenimiento habitual). En eso, noté una mancha de "aceite" en la junta de la tapa del motor y hasta la compré luego para cambiarla. Dado que ya había cambiado las bujías y el líquido de transmisión, procedí a encender el auto con el bonete (capot) arriba. En eso, mi papá que pasaba por ahí, me dice: "apágalo... rápido", algo que me extraño porque todo funcionaba aparentemente bien. Y, cuando salgo, me muestra que, la mancha de "aceite" era... gasolina, que saltaba de un inyector.

Procedía a desarmar los inyectores, y efectivamente, el sello de goma del inyector ubicado sobre el tercer cilindro estaba roto. Lo gracioso es, que fui a la Delta Comercial (Concesionaria) y no lo tenían; así que, 4 horas después y unas 3 tiendas de repuestos recorridas: encontré la condenada junta superior (la de la izquierda de la imagen). Sobra decir que, compré 6 juegos y cambié todas las juntas superiores e inferiores de los inyectores... incluso, el conjunto quedó mejor que de fábrica, ya que las juntas superiores son el doble de grosor de las originales (más seguridad).

Si mi papá (quien disfruta de supervisar mis trabajos) no hubiera estado en ese lugar y momento: quizás, se me hubiera incendiado el carro con el calor del motor y las gotas de combustible. Técnicamente, le debo la vida a mi papá, como por quinta o sexta vez (me ha salvado en otras ocasiones). En fin, con un simple mantenimiento, mi consumo mejoró en un 12-20% en ciudad- autopista. 

P.d. Ahora, me toca cambiar la correa del alternador... y, la junta de la tapa del motor: cosas, de la edad.

28 sept 2015

15 sept 2015

Tomar tu mano.

Una vez, me preguntaste, qué era el amor
Y puse tu mano, en mi corazón.
Una vez, me dijiste, que no tenías una ilusión
Y al final de tu historia, ahí… estaba yo.

Susurré a tu oído, una vieja canción
Y tú la completabas, en cada oración.
Fue entonces, cuando te pedí perdón
Mientras robaba tu alma… en aquel rincón.

Nunca supe, si fue en aquel salón
O si fue tu sonrisa, en ese balcón.
Lo cierto es, que perdí la razón
Cuando vi tus ojos… con aquella ilusión.

Tomar tu mano, mujer, esa fue mi intención
Cuando mirabas la Luna, muy lejos del Sol.
Y si pudiera decirte, simplemente, qué es el amor
Te diría que es... este momento; y, nosotros dos.

4 sept 2015

Un "simple" asado.


El concepto “familia” está íntimamente ligado al concepto “comida”; y, no es porque usted se los fuera a comer; sino, porque toda reunión familiar termina con, al menos, un “aperitivo”. Y, viendo las cosas en retrospectiva, fue así como comenzó mi calvario…

Sucede que unos meses atrás, uno de mis cuñados nos invitó a todos a un suculento asado en su apartamento (le quedó bueno al principio; pero, se le quemaron algunas carnes al final). La cuestión es, que una de mis hermanas comenzó con la cantaleta (asedio continuo a su hermanito por un asunto determinado) de que ella, también quería su BBQ.

Un ser humano normal; o, alguien que no tenga varias hermanas, no se puede imaginar lo que es tratar con un temperamento (jodeínico… esta palabra no existe en la RAE; pero, es un concepto bastante exacto para describir la situación de zozobra a la cual se somete a su hermano cuando se necesita ayuda. Ahora, multiplique eso por 4 hermanas). En resumen, gracias a la insistencia ininterrumpida de mi hermana tuve que hacer un estudio pormenorizado (durabilidad, calidad, precio) de cada modelo de bbq existente en la República Dominicana durante algo más de tres semanas… hasta que Dios la iluminó y se decidió por uno (creo que el modelo más grande de la marca Char-Broil: ella, es bajita: le gustan las cosas grandes).

En fin, por estar dándoles mantenimiento a los peces, yo no fui a la compra. Solo le dije: “tráelo desarmado… en su caja” (en cuestiones de gas/combustible no puedo confiar en un tipo de una tienda que ensambla algo de pie y a las “carreras”). Ella me contó que el vendedor le dijo: “¿Desarmado?... Aquí vino un Ingeniero que no pudo ensamblar el suyo”. Bueno, quizás, era ingeniero químico (digo, yo); pero el asunto es que llegó “mi” caja con el “sagratum bbq” (ella lo cuida así).

El ensamblado. Da un poco de risa… por mis manos, han pasado para ensamblaje: varias parrillas, bbqs de carbón, hornos de jardín, etc. Pero, la verdad, nunca había tenido la oportunidad de ensamblar un bbq “moderno” de gas. Así que me puse en mi asunto y al abrir mi caja de “juego” me encontré con unas instrucciones bien precisas… y, muuuuchas piezas (la verdad, no las conté). Lo gracioso, encuentro yo, es que he ensamblado  bbq de carbón que solo usan unos 10 tornillos. Este modelo trajo como 200 piezas (algo divertido)… por lógica, fui preensamblando los dos lados, y, luego como de una hora y algo, el “cacharro” ya estaba listo.

Pero, ese no es mi calvario, ni el motivo del post. Mi calvario es que, mi hermana (dueña) me dijo: “no me quedó un centavo, deberás regalarme el tanque de gas” (eso, tampoco fue problema). Bueno, al día siguiente fui a comprárselo y me dijo: “¿Vienen llenos?” (Muchacha del Car$%#jo ¿Cómo van a venir llenos?... Nota: un tanque de gas lleno es menos peligroso que un tanque vacío). Así, fue tuve que salir un domingo (con mucho sueño) a comprar el tanque y llenárselo para estar listo al medio día. La excusa de ella es: que es bajita y “delicada” (pero, come como un rottweiler… y, lo peor es que se ofende, si se lo menciono). En fin, tanque al hombro y bbq en mano se lo instalé en el patio, bajo la sombra a las 10:45 a.m.).

Hay veces en la vida en que a uno le “venden” un sueño… bueno, cuando uno despierta, tiene que tomar las riendas de las cosas. Resulta que, la experta cocinera (lo es), me dijo que (yo) solo iba a “supervisar” (de lejitos)… y, en resumen: terminé haciendo (solo) el asado. La suerte es, que uno puede probar mientras cocina. Todo me salió bien; salvo, que mi familia “vegetariana”: come demasiada carne. Nadie habló de ensaladas, vegetales, etc.; era más, como Animal Planet (leones)… pero, con cubiertos: solo carne.

La cuestión es que, mi hermana quiso hacer su segundo asado (ella sola)… y, el humo me recordó a Mad Max (Hola, rubia; digo, Charlize). Fue, en ese momento en que me di cuenta de mi calvario: siempre tendré que hacer los asados (o, al menos, tengo esa excusa para comprar mis antojos parrilleros). Lo cierto es, que cocinar es un arte. Pero, además es una ciencia bastante exacta en cuanto a sabor, temperatura y cocción (Siempre pregunto cómo prefieren la carne). Bueno, es una experiencia que agregué a la lista (ensamblar un cacharro de estos)… aún, no he probado la hornilla lateral (debo inventar algo salteado… y, con carne. Quizás, necesite un wok). En fin, ya tengo hambre (dejemos la historia aquí).

Y en este punto uno se pregunta sobre ¿Qué relevancia tiene esta historia?... en la vida, cada situación es una aventura y una experiencia (neutra). Casi nada saldrá como lo planeado; pero, no por ello debemos dejar que las situaciones (adversas) dicten el rumbo de las cosas (el vaso no está medio vacío o medio lleno: tiene agua, ese es, el verdadero punto). Además, si no compartimos las peripecias en que nos vemos envueltos día a día con nuestra familia ¿Con quién lo haremos? Al final, la vida pasa y las cosas cambian. Pero, la familia siempre estará ahí al final del día (y comiendo los domingos). ¿Por qué mis hermanas no se antojan de un auto deportivo, caja mecánica de 6ta y tracción trasera???      

P.d. Lo más gracioso es, que pasé bastante tiempo del ensamblado (como media hora) buscando la ubicación de un tornillo que “sobraba” y que no estaba en las instrucciones. Es el tornillo que sostiene el adaptador metálico de encendido manual (omisión del instructivo)… en el, aguanto la válvula de gas cuando está desconectado el tanque; un buen uso. Y nada, una simple experiencia más en este camino de la vida. Por cierto, la imagen de arriba no es mía: nunca he tenido un incendio (precavido x3).

29 ago 2015

El Quinto Baúl.


Algunas veces, las personas me preguntan el significado de estos posts (baúles); ya que, no obedecen a una cronología. Lo cierto es, que cada baúl marca un cambio interior en mi persona. Me explico… 

Metafóricamente, este blog es un ático. Lugar, en donde las personas tienden (en lugares donde no se les habita) a guardar aquellos objetos fuera de temporada o en desuso (pero, de apego emocional), y en donde se les ubica en forma de almacén. Ahora bien, cada persona, con el paso de los años mantiene su particular forma de ser; pero, a la vez: cambia. Ese cambio, resulta casi imperceptible dentro del día a día. Pero, a grandes rasgos, crea una huella única; digamos que, es una singularidad. Mis baúles representan ese cambio (interno) en donde el exterior del mundo cambió algo en mi de una forma "definitiva".

Siempre me gusta entrelazar mis posts y variarlos conforme el ritmo de la vida. Así que, quizás, el quinto baúl pase desapercibido. La idea es: plasmar algunas inquietudes, buscar algunas soluciones, quemar algunas neuronas; y, en esencia, hacer de este mundo, en cierto modo, algo mejor. No es que vaya a crear un algoritmo para decodificar metadatos, en un mundo en el cual la información supera al ser humano 150 a 1. No, solo pretendo tomar lo que tenemos y ver qué podemos lograr al cruzar algunos cables y unir algunos puntos. Es, algo simple. Lo cierto es, que una inteligencia artificial está limitada por la lógica de la programación, y el ser humano está limitado por sus propios impulsos y sus carencias. La pregunta simple sería: ¿Cómo mejoraría una inteligencia colectiva un mundo cada vez más pequeño?

La idea, no es que cada día nos parecemos más a las máquinas, o ellas a nosotros; el punto es que hay preguntas irrelevantes en un mundo en donde las ansias de poder de algunos pocos están afectando la existencia de la gran mayoría. Pero, nada… a escribir.

16 ago 2015

Mis 9 años.

Mi blog tiene ya... nueve (9) años.

Siempre me gusta resaltar lo aprendido durante el año que pasó. Entonces, para este año diría que... hace unos 25 años, intentaba construir el auto perfecto (mi viejo trike... quería ser ingeniero automotriz); y, recuerdo que pensé que si ponía dos imanes contrapuestos (que se empujaran) en polos opuestos podría obtener un motor “perpetuo” capaz de llevarme a donde sea sin combustible (la verdad: no pensaba en el medioambiente, ni en velocidad máxima... pero, era mi concepto). Al día de hoy, entre tantas innovaciones “futuristas” que existen, aún no conozco ningún concepto que involucre el magnetismo como una opción motriz principal. No se confunda: tenemos electro imanes produciendo electricidad y movimiento en muchos modelos comerciales; pero, como “parte de” (necesitan de una carga “externa”) y no como una solución alterna al “mercado”, es decir un mecanismo autosustentable. Entonces, lo que me empuja a escribir es eso: llenar el vacío que veo en el mundo; entre las personas; entre una idea y un producto terminado.

Así que, partiendo de la idea de que un blog de ciencia, de literatura, de sociedad, de expresión, etc., es solo una parte de un todo más complejo que la propia existencia (ya que, tener una idea es muy distinto de expresarla y a crear algo). Quizás, por eso comencé este blog, para dar mi opinión, para hacer un simple aporte a una idea; o, simplemente: para crear y alterar las cosas. Quizás, por ello me he alejado con los años del ciberespacio. Ya que, la verdadera revolución del mundo no se vive online: se materializa día por día. Aunque en la Red se comparten estas ideas.

Lo sé, este es mi aburrido blog personal, que cumple sus 9 años. Pero, debo confesar que al escribir, me divierto con ideas y situaciones simples de la vida ordinaria. Quizás, eso crea lo extraordinario del momento. A veces, importa más el pequeño pez que saqué de un filtro en donde creció aislado, que la contaminación por desechos tóxicos en un río a medio mundo de aquí. ¿Por qué? porque el esfuerzo propio es una situación realista de la vida (vivencia); mientras que, el "desastre natural" es una situación compleja y subjetiva. Una simple idea puede cambiar el mundo; no así, una idea compleja; ya que, en esencia, al escribir, se busca expresar las cosas de la forma más sencilla posible.

Vivimos en un mundo lleno de posibilidades y probabilidades, sin embargo: lo que nos hace bloggers no es tener un blog y escribir sobre temas científicos, actuales o futuristas. Lo que nos hace lo que somos es la forma en que alteramos el mundo con nuestras ideas y pensamiento. Parecerá absurdo, pero: "pesa más un puñado de arena, ubicado en un mal lugar; que, una tonelada de arena en la playa" ese puño de arena: puede causar un accidente; mientras que, la arena de la playa está en su lugar natural. Entonces, lo aprendido en este año se resume en una sola línea: “Para poder avanzar, debemos encontrar el lugar correcto de las cosas”. Lo complejo de esto es que, en la práctica, debes tomar lo que tienes a mano y encontrar la mejor solución posible a las cosas.    

2 ago 2015

Moenia - Jamás (2015).


"Tu eres una Diosa, y yo... un mortal".


 "Tu eres tan hermosa, y yo... normal".

P.d. Lo nuevo de Moenia en este 2015.

31 jul 2015

Windows 10: Primeras impresiones.


Llegó el día veintinueve (29) de julio y en mi pantalla apareció la notificación de actualización de Windows 10. Ya tenía la laptop formateada de un mes atrás (backup ready), por lo que procedí a hacer la actualización. Por cierto, parece más un update que un upgrade, de lo rápida y sencilla.

En mi caso, no se afectó ningún documento o programa instalado. Solo tuve que reinstalar el disco del router inalámbrico, por un problema de conexión con la red. Sobra decir, que cada vez que voy a apagar Windows, aún busco el panel derecho (Win8.1). Volviendo a  los programas instalados, solo tuve que volver a instalar el paquete de idioma de la interfase (español). Ahora bien, algo que tuve que “deshabilitar” fue a Cortana (asistente) y a una docena de ajustes que son altamente invasivos de nuestra privacidad; que van, desde el reconocimiento automático de voz (no hay un control manual de micrófono... hola, NSA) hasta el “emparejado” de dispositivos ajenos a la red de forma automática y el acceso de aplicaciones de terceros a nuestros correos, calendario, etc. Sí, la NSA ha hecho un trabajo “fino”, solo espero que rinda sus frutos (espiar a los “malos”, no a los buenos).

Me cansé de buscar el windows update en el Control Panel… ahora está bajo el ícono de “Configuración”. A nivel de arranque, el sistema se vuelve un poco lento en los primeros reinicios, pero, tiene unos íconos más “gráficos” por decirlo de algún modo (atractivos visualmente). Y nada, este es mi primer reporte, ya tengo mis dos laptops corriendo en Windows 10… sin problemas aparente.

P.d. También desactive el Onedrive del arranque, por si acaso. Pero, Windows ha cumplido las expectativas... hasta ahora, el único problema que tuve fue con las descargas: por algún motivo, Microsoft Edge (Internet Explorer) no descarga archivos de más de 1GB... He seguido con Chrome.

19 jul 2015

Una cuestión de... mustangs.


Digamos que la historia comenzó con una moto que casi compré el año pasado; digo “casi”, porque luego de revisarla (necesitaba mucho cariño), regatear con el dueño (durante meses) y elaborar todo el proyecto de modificación (soy algo largo y pesado... necesito una moto grande: modificada) el señor me saltó el día de la compra con que él no era el propietario “legal”... (a un abogado). Sobra decir, que se me fueron los planes por el desagüe. No obstante eso, mi mamá (a quien le contaba mi desdichado suceso) no quería que comprara nada de dos ruedas (salvo una bici), debido a que me gusta modificar demasiado las cosas y correr… en resumen, terminé prometiendo que no compraría ninguna moto (por un tiempo); sumado, a una antigua promesa de no pasar los 140km/h en ningún vehículo… bueno, esa la he roto algunas veces; pero, la intención cuenta.

La cuestión es que necesitaba algún proyecto de mecánica, y por cosas de la vida, me topé con un mustang 2004 (edición 40 aniversario) que se veía bien... en fotos. Nunca he sido amante del Ford Mustang, por el simple hecho de que son pesados, ineficientes y tienen el chasis y el motor de una minivan (cosa, que no muchos saben). Pero, quería comprarlo para modificarlo “bastante”. Bueno, este mustang en específico, era un buen proyecto para mi, porque tenía problemas de transmisión (de seguro el solenoide), así que me decidí ir a verlo (me quedaba cerca). Dicen que no hay nada como la primera impresión; y, lo que pude ver, se resume en lo siguiente: no había una sola parte de la carrocería alineada (lo habían desarmado por completo; el bumper trasero, reparado de mala calidad; el interior, olía a mecánico (sudor), lo que implica que tenía problemas eléctricos, el aire acondicionado estaba dañado; y, quizás, usaban el auto para fiestas (había arena de playa). Era un completo desastre, y lo descarté. 

Bueno, los mustangs son autos “deportivos” económicos; y, no obstante usted brinque de su asiento (si es fanático del mustang), seguirá siendo una minivan con carrocería de coupe, con un motor pesado, de combustión ineficiente (OHC), sin doble eje de levas, ni aluminio, ni reducción de peso, ni nada. La idea mercadológica es: que usted haga esas modificaciones invirtiendo algo de su tiempo y mucho dinero (lo cual resulta bastante ilógico). Puede modificar un auto, personalizarlo y llevarlo hasta el tope de sus límites. Pero, de ahí a comprar una “marca” (un ícono), por una “historia” olvidada por su fabricante: no le veo sentido. De qué vale tener un V8 de 4.6 litros (con unos 260-300 HP) si el auto pesa como un yunque. Se que es una cuestión de costos/beneficios para Ford Motors Company. Pero, es increíble lo que un fanático de mustang debe hacer para reducir el peso y obtener un carro aceptable. Sin embargo, son de los “deportivos” (económicos) más vendidos (en EUA)… hechos a partir de un coupe diseñado para las “secretarias”. Está claro que Caroll Shelby convirtió este auto en un carro de hombres (fastback); pero, me pregunto: ¿Como el mustang 67 (“ligero, emblemático y fuerte”), se convirtió en un auto tan pesado e ineficiente?  

Y, no se trata de crear un nuevo auto. Ya tenemos el mustang 2015 (sí, el de 4 cilindros (2.3L) turbocargado, con culata de aluminio y 6 cambios: 300 caballos (hp))… este 4 cilindritos tiene la misma potencia que un modelo similar v8 (4.6L) de 2009. Al menos, Ford está entrando en la competencia deportiva (esperemos que no tengan tanto plástico como el Camaro). Hay quienes dicen que este mustang es un Fusión Coupe… pero, en lo personal, a mí me gusta (quizás, porque nunca he manejado en sexta marcha). El espíritu del mustang es agilidad y libertad… al menos, ahora, están por un mejor camino.

Por cierto, mi intención era ver cual era el límite de peso que podría sacarle al mustang, para mejorar el rendimiento. Eso, junto con muchos otros “trucos” que hubieran sido un buen entretenimiento de fin de semana… pero, en retrospectiva, hubiera sido un simple capricho en el que hubiera malgastado tiempo y dinero. Quién sabe y algún día termine yo con ese 2.3L... cuántos caballos más, se le podrán sacar? 

1 jul 2015

Michu...Bishi.


Lo siento, no me refiero a la marca (Mitsubishi); me refiero: a una gata. Toda la historia comenzó como un reto cotidiano más: a mi casa, llegó una gata (de algún apartamento vecino), que se acostaba sobre mi carro y en la alfombra de la entrada. Lo penoso del caso es que, tenía un collar que le apretaba bastante el cuello, y la estaba lastimando; quizás, por eso estaba tan flaca. Digamos que mi casa es un lugar predilecto por los gatos… y he tenido tres experiencias gatunas (gatos de medio tiempo. Bueno, al margen de que me ensucian todas las paredes con sus patas, defecan en la grama y los he encontrado hasta en el motor de mi carro. Nota, una vez saqué 4 gatitos de ahí). En fin, me propuse quitarle el collar.

A diferencia de un perro, es fácil saber cuando un gato va a atacar (dilatación de pupilas, postura, etc.); pero, eso era irrelevante, ya que si ella me veía a menos de dos metros: corría como loca. Usted dirá que era una tontería y una pérdida de tiempo; pero, alguien debía hacer algo. Así que cada día, al salir a buscar los periódicos, trataba de acercarme a ella… sobraría decir que en mi vida había visto un animal tan arisco y desconfiado (no he conocido una mujer así…aún). Día tras día, trataba de acercarme un poco, ya que la veía cada vez más flaca. Y, sin resultado alguno, al décimo día, dejé de intentarlo. Le di un suspiro, y me limité a escuchar los pleitos con sus “pretendientes”. 

Pero, al día catorce, salí a chequear la cisterna y para mi sorpresa “Michu” estaba recostada en un pequeño muro de la entrada. Cuando me vio, se asustó; pero, al levantarse la llamé suavemente: michu… michu… (Hey, eso funciona) y pude acercarme lo suficiente para acariciar su cabeza, su cuello; y así: pude quitarle el collar. Al quitar el collar, encontré que se había oxidado en una argolla… no sé por qué la gente le pone un collar apretado a ciertas mascotas. Un gato y un perro son animales libres: no les ponga collar (salvo para salir a la calle). Bueno, un chip es peor, pero, al menos, deben comprar collares de calidad y que no lastimen al animal. Desde ese día, pude apreciar la diferencia entre un animal casi asfixiado, y un animal libre. La gata ha engordado, y ahora duerme frente a la cocina… y, si bien, no dice: “Papá”, ya la he enseñado a decir muauá (casi habla, bueno, cuando tiene hambre).

Y nada, toda esta tontería es solo, para recordar la diferencia entre intentar lo imposible y ser persistente. Al menos, ella no se ha comido mis peces (los he tapado a casi todos)… aunque, a veces, me espanta su sigilo (se me cruza entre los pies, cuando alimento los peces). En fin, es la historia de michu, mi primera experiencia gatuna de tipo femenino (nota: en teoría, las gatas, nunca abandonan su hogar; a diferencia, de los machos) Esta gata, digamos, que es: la excepción a la regla.     

7 jun 2015

Elegante y sencillo.


Quienes hemos tenido perros (desde cachorros, hasta… R.I.P.), sabemos algo que no todo el mundo distingue: los perros, con la edad, pierden los dientes. Bueno, los que “roban” huesos. Me topé por casualidad con esta foto de Zappa, un gracioso perro galgo de 15 años. Y digo gracioso, claro, por su lengua. No se trata de ningún trastorno genético o malformación, sencillamente: a Zappa le faltan algunos dientes (por su edad).

A mi chihuahua le pasaba lo mismo, y me reía con solo mirarlo (tenía esa misma cualidad: lengua afuera a la izquierda… producto de “robar” huesos de vaca, propiedad de mi pastor alemán). Recuerdo cuando ese perrito “cadavérico” y del tamaño de un puño llegó a mi casa con su “enorme” cabeza y su corto hocico. Fue un regalo de un veterinario amigo de mi papá para mi hermana… pero, ella decía que el perrito era muy flaco y feo… así que busqué una caja de zapatos y me quedé con él. Con el paso de los años “robaba” todo tipo de huesos: desde pollo hasta vacuno… claro, si podía arrastrarlo hasta su “madriguera” (zona particularmente defendida por él y rodeada de huesos aleatorios... la cual estaba en la zona baja de mi closet… él, era el “portero”). Y claro está, con los años perdió 3 colmillos y muchas piezas dentales. cuando me mordía (al limpiar los huesos regados), solo sentía la encía... y su mal humor de viejito. 

Nota: el chihuahua solo debería comer arroz con salsa de carne, no está diseñado para comer huesos “duros”; pero, son genéticamente JARTONES y algo racistas (otra historia). Sin embargo, ese perrito me esperaba cada día al llegar del colegio y parte de la universidad… quizás, era por la comida gratis (saltaba hasta la mesa, tipo olimpíadas; y, se cruzaba entre los pies de todo el mundo). Vivió más de 14 años; quizás, “demasiados” para un chihuahueño. Aunque, disfrutó de sexo consensuado en múltiples ocasiones (con la chihuahuita de al lado... y, algunos cojines de la sala), casi una década y media de comida gratuita (toda su vida), alojamiento, viajes, baños, etc. Fue, todo un faraón. Y al margen de ser el canino más pequeño que he tenido, era el que más bulla hacía (ladraba mucho) y se orinaba en todos lados (mañoso).

Recuerdo que el susto más grande que me dio (al margen de que se me perdió por 2 días en la finca) fue el día que lo escuche ladrando a muerte con mi pastor alemán en el patio (pensé lo peor, pues el perrito entraba casi entero en su boca). El pastor lo encontró “desafiándolo” por un hueso en la puerta de su jaula, y mas allá del griterío “agónico” del chihuahueño, éste solo le había puesto una pata encima, y estaba lamiéndolo como a un cachorrito… solo jugaba con el (por suerte). En fin, al ver a Zappa, me recordó que el tiempo que vivimos se basa más en los buenos recuerdos, que en el propio tiempo.

P.d. De Zappa solo puedo agregar el título: elegante y sencillo… así es, el “estilo de lengua” de un can “anciano” y sin dientes.

19 may 2015

¿Telequinesis?



El fin de semana, mientras estábamos en un almuerzo familiar mi sobrina mayor estaba viendo un programa de “reality show” (99.99% basura); y yo, me senté a comer al lado de mi sobrinita frente a la tv (mesita). Sobra decir que el control estaba a unos dos metros, y mi sobrina mayor se había parado de su lugar (oportunidad de cambiar la tv). Bueno, dado que no alcanzaba la dije a mi sobrinita, mientras extendía mi brazo y me concentraba: “aún necesito desarrollar mis habilidades telequinéticas”… y al momento, el control remoto llegó a mi mano; bueno, ella se paró a pasármelo (pero funcionó el concepto: atraerlo a mi sin tener que pararme). En fin, mientras le explicaba a mi sobrinita sobre la telequinesis, le planteé los aspectos del por qué al margen de la ciencia ficción: no es posible.

En primer lugar, siempre me gusta mencionar “The Matrix”, cuando el niño le dice a Neo: “no es la cuchara la que se dobla, eres tú mismo”. Y usted se cuestionará sobre el por qué menciono una película en un tema de ciencia. Bueno, en esencia, la telequinesis consiste en interrumpir el campo gravitatorio de la tierra. Así es, no se trata de levantar una cuchara o un objeto; se trata, de generar ingravidez enfocada en un lugar específico. Ahora bien, ¿puede un humano interrumpir físicamente la gravedad del planeta para mover un objeto? Definitivamente, no. Y es por una simple razón: la cantidad de energía necesaria para producir la “ingravidez” de un objeto fuera de un espacio controlado es inmensa. Lo que equivaldría a que solo un ser humano “atómico” (con suficiente energía radioactiva acumulada dentro de los tejidos; y que, de algún modo transformara en electromagnética) así entonces, podría “tratar” de enfocarla en un punto específico. Lo único “malo” es que si sobreviviera, posiblemente mataría a cualquier ser vivo cercano (por la radiación).

En segundo lugar, usted me dirá que ha visto “magos”, trucos y situaciones en las cuales el objeto se mueve, que Youtube está lleno de eso. Bueno, para eso tenemos imanes y electroimanes. Una anécdota graciosa que recuerdo es que en los años 70 una universidad de Estados Unidos adquirió un viejo generador eléctrico (enorme y “obsoleto”), sin embargo, lograron armar una cámara dentro de la cual los objetos “flotaban”, y me gustó la parte en la que introdujeron un vaso de foam (poliestireno) ligero y nada magnético… y sí, floto. La cuestión era, que el generador no hacía flotar nada: generaba un campo electromagnético tan grande que era capaz de interrumpir la gravedad terrestre… y, hacía flotar las cosas.


En fin, de nada vale en concentrarse en levantar el control remoto, es más fácil comprar un dron y adaptarle algún mecanismo para que nos trajera el control remoto a nuestra mano… a no ser que nos pase como a Enrique Iglesias… y, terminemos en cirugía, o con un novedoso corte de pelo. La moraleja es que un ser humano no debe ser tan vago de intentar atraer un control remoto solo con la mente: párese, compre una TV con comando de voz o pídalo a alguien. Por cierto, Samsung y LG han reconocido que sus Smart TV espían a sus usuarios y pueden grabar sus conversaciones o preferencias. ¿Acaso no hacen eso la NSA y los chinos mediante todos los dispositivos electrónicos del planeta, desde hace más de una década? (bueno, desde antes, solo que ahora es a una escala masiva).  

¿Entonces, podría un ser vivo hacer eso? No, moriría de cáncer o de autocombustión (tipo microondas); ya que, nuestro cuerpo no es muy útil para manejar y almacenar grandes cantidades de energía. Bueno, a no ser que algún genetista tomara adn de células de una anguila eléctrica y la insertara, supongamos en una persona (experimento ilegal; pero, si algo he aprendido es que locos (y dinero... militar): hay de sobra en el planeta). Aunque conozco electricistas que tienen las terminaciones nerviosas, literalmente: fritas (no les afecta algunos voltajes de electricidad); pero, de ahí a generar un campo electromagnético, eso es: pura ficción. Cualquier video o noticia que usted vea sobre el tema: se trata de imanes, fluidos ferrosos, hilos, implantes bajo la dermis, o soplidos: como en “charlie charlie”… por cierto, este “juego” me dijeron que es para promocionar una película (gente vaga).



5 may 2015

El “gancho” de Windows 10.


Bueno, como usuario de Windows (95, 98, XP y 7), debo decir que fui de los primeros en adquirir el Windows 8. Necesitaba una laptop con hdmi (para las películas) y encontré una buena Toshiba de 17 pulgadas con Win 8. Me tomó unos días examinar y descubrir las “novedades” de la plataforma (nota: a veces, trato de apagar  mi vieja Toshiba (Xp) como si fuera este sistema operativo (risa)). Pero, como todo el mundo sabe, de Windows 8, pasamos a 8.1 (de forma gratuita), en poco tiempo. Y debo decir, que el cambio se sintió en la plataforma (no fue un simple update). Lo sé, porque tengo otra laptop que vino de fábrica con el Win 8.1, e incluso, existen diferencias de updates entre ambas.

La cuestión es, que pronto saldrá la versión “final” de Windows 10 (fines de Julio, creo); y, desde hace unos meses se encuentra gratuito el "Technical Preview" de este sistema operativo para las plataformas Windows 7 en adelante. Y, desde hace tiempo escuché los rumores que todos los sistemas operativos serían actualizados de forma gratuita; sin embargo, hace unos días estaba leyendo algo que me sorprendió, dicho en enero por un ejecutivo de Microsoft, y es que: la actualización “gratuita” de la versión final a Windows 10, es solo: por un año. Pongámoslo así: quienes hemos formateado, particionado y reinstalado un sistema operativo, sabemos que “deshacer” un upgrade; o, instalar un sistema operativo sobre otro: es un verdadero desastre y dolor de cabeza. Por ejemplo, hace una semana formatee mi laptop Win 8, y para mi sorpresa tuve que esperar unos 200 updates antes de que me diera la opción del upgrade a Windows 8.1 (antes solo fueron unos 15... se ve que Microsoft le ha dado seguimiento a Win 8 independiente del 8.1); por lo que, ni siquiera me imagino el desastre que sería para mi hacer el upgrade a Windows 10, e intentar deshacerlo.

Mi consejo es: si quiere un Windows 10, compre su laptop o desktop que venga de fábrica con este sistema operativo. Actualizar por un año la versión final (para luego “deshacer” el upgrade), terminará en un “backup” de sus datos, un formateo de la Pc y varias horas de updates (automáticos) que convertirán su laptop o desktop en una “tortuga” durante el período de actualización de su sistema operativo original.

P.d. Bien lo dice el viejo adagio: “No dejes camino real, por vereda”. De mi parte, el día que cambie una de mis laptops es que probaré el Win 10; y, entonces, daré mi opinión. 

Update del 2 de junio: Si hablando castellano, a veces, no nos entendemos; que será al traducir ideas. Según últimas declaraciones hay una errada interpretación del año "gratuito" de win 10. La idea es que usted puede actualizar gratuitamente su Win 7 y 8 (con sus variantes), si lo hace dentro del año. A partir de la actualización, su Windows 10 será suyo de forma gratuita "de por vida" (actualizaciones, etc) y no, por un período de un año (tipo trial).


27 abr 2015

Algunas canciones de (Mario) Sandoval.

Como latino, escritor, compositor y adicto al sonido: siempre he estado atento a la evolución de nuestra música (en español); y, recuerdo que hace muchos años llegó a mis manos un cd del grupo Lu (México), y la verdad es que me enamoré de Paty Cantú (bueno, platónicamente... hola, preciosa). Y sobra decir que: el dueto fue un éxito. Tenían esa armonía sobre el escenario; pero, se separaron en el 2007. Un par de años después, me topé con la canción "A quien tu decidiste amar" de Mario como solista, y acompañado de la hermosa y talentosa Susy Ortiz (creo, que era su vecina)... y volvió esa "magia" de Lu. Pero Susy se retiró por motivos de salud (se te extraña y, a tu sonrisa). Por cosas de la vida, navegando en Youtube hace como un año me topé con un video de Sandoval, esta vez con Verónica de la Garza, quien lo acompañó durante un tiempo. Aquí algunos de sus videos que están en su canal de Youtube: 





Y nada, solo les aconsejo a cada uno (Mario, Paty y Susy) que algún día se "reencuentren"; ya que, por encima de lo comercial, está esa química que grita por unir los polos opuestos en una misma línea de la vida. Y, Mario, Paty y Susy la tienen: ¿Quizás... un trío??? no está mal la idea.

22 abr 2015

Una reflexión, en este: "Día de la Tierra".


Tengo mucho trabajo y muchos posts pendientes; pero, siempre hay tiempo para las cosas del planeta. Así que, comparto este video, ya que trae un interesante mensaje sobre cómo nuestra "civilización" está destruyendo nuestra existencia: simplemente, por dinero. 


Debemos dejar de crear planes para "futuras generaciones" y empezar a crear planes y medidas para el nosotros y el ahora. Los países petroleros, siguen contaminando... Alaska, parece un hermoso país tropical; y, Fukushima: sigue contaminando el mar (ayer, hubo un nuevo vertido radioactivo... que terminará en algún pez que usted consumirá); miles de animales mueren debido a vertidos químicos que hacen empresas por cuestiones de "costos" en ríos o canales; la temperatura del planeta sigue elevándose... y nada, este es nuestro diario vivir.

Lo gracioso, es que yo (un isleño del Caribe) crío peces africanos, asiáticos y suramericano; y, tengo plantas "prehistóricas"... ¿Qué significa esto? que al mundo (las personas) solo le hace falta voluntad... tenemos los medios; pero, a nadie le duele, hasta que le toca. Vivimos una vida del "yo", mientras nuestro mundo se limita a un smarthphone, las diligencias de fin de semana y algún plan de viajar. La vida, es algo más que lo que te ofrece una sociedad de consumo. Siembra una planta y cuídala hasta que florezca (incluso una comestible como el ají o el romero); cría un animal durante todo un ciclo de vida; protege tu entorno natural: poda tus arboles, abona, riega las plantas, etc. Limitar la vida a comprar un fruto "natural" en una tienda, es como disfrutar del tocino: sin saber de dónde proviene (un animal inocente). Y lo gracioso, es que gran parte de la humanidad (seres humanos) se ha vuelto como "ganado" (dirigido), donde el estatus social de una persona se establece por la apariencia no por la esencia de su ser. 

De mi parte, para futuras generaciones, solo les diría: se perdieron lo mejor de la vida... algunos, tratamos de hacer lo correcto. Pero, eramos muy pocos... y, nuestro conocimiento se limitaba a nuestras áreas de estudio y zonas geográficas. Sin embargo, aprendimos empíricamente que más allá de la ciencia: la vida, siempre encuentra formas de sorprendernos. Con algo de voluntad, pocas cosas se extinguen. 

Y nada: Feliz día Madre Tierra... no nos extingas (todavía).

8 mar 2015

El Super lagarto.


Bueno, no escribiré sobre ciencia, botánica o zoología: me limitaré a narrar una breve historia real sobre la amistad entre un lagarto y un televisor. Recuerdo, que todo comenzó hace unos años, un fin de semana cualquiera, cuando sentado en una mecedora noté que había un lagarto que se encontraba en el borde de la ventana, y ni atención le puse. Estaba mirando un programa de mecánica y recuerdo que mi hermana mayor estaba acostada en el sillón y me dijo que buscara otra cosa menos “aburrida” (cuando se le daña su vehículo: ahí, si la mecánica no es aburrida: es milagrosa). En fin, cambié el canal a Natgeo o Animal Planet y solo recuerdo que escuché un griterío: era mi hermana, a quien el lagarto le había “saltado” encima.

Recuerdo que cuando encontré al pobre animalito, tenía la respiración acelerada y volvió a subir por el espaldar del mueble a la ventana. Sobra decir que, desde esa fecha, mi hermana miraba dos veces antes de acostarse en el lugar, y cuando alguien decía la palabra “lagarto”: saltaba del sofá. La cuestión es que nadie comprendía por qué el animalito saltaba algunas veces desde la ventana. Hasta que, un día estaba viendo un especial sobre la selva amazónica, no había nadie sentado en el sillón y pude apreciar lo siguiente:

El “Super lagarto” saltó de la ventana y cayó en el sofá-cama; en pocos segundos, recorrió todo el espaldar hasta llegar a la mesita (al lado de la tv); subió por el tarro, hasta unas ramas; y, estando a nivel de la televisión: saltó hacia la pantalla: como un super héroe… de ahí su nombre. Sobra decir que intentó hacer la maniobra (infructuosamente) unas 3 veces. Ahí estaba la respuesta: el interesado animal quería ir al bosque: vía la TV… algo, un poco difícil; pero, gracioso.

Este intrépido animal ha durado horas viendo tv (quizás, calculando; o, esperando el momento oportuno para "cruzar"); y, digo, ha durado, porque el fin de semana pasado noté que se asomaba por su territorio. Al menos, dejó de saltar a la TV… pero, ambos, crearon ese vínculo (lo encontré durmiendo en un florero de ramas secas una vez). A veces, cuando lo veo, le pongo Animal Planet (tiene más verdes que Natgeo) para que se deleite con los colores. Al fin y al cabo, quién soy yo para contradecir su sueño de atravesar la pantalla hasta ese nuevo hogar.  Y nada, solo espero que no sea una conducta generalizada...  

28 feb 2015

Cosas de la edad.


Hoy, mientras saludaba a mi hermana menor que había llegado a casa, noté que la puerta del frente estaba “entrejunta” y le pregunté a mi mamá, respondiéndome mi hermana que mis sobrinos estaban en el frente jugando con un frisbee. Y claro, su tío tenía que supervisar…

Digamos que ellos están “perfeccionando” su técnica. La chiquita, de 12 años, hizo 3 buenos lanzamientos… como de 200 intentos (parece un alien: flaca y alta). Y mi sobrino mayor, de 17 años: ese, tiene esperanzas (Le gusta una vecinita del edificio del frente... quizás, por eso hacía tanto escándalo). Dado que mi sobrinita lo lanzaba para todos los lados, pude apreciar el maltrato “ecológico” al que fueron sometidos algunos árboles y plantas de mi casa (de qué me vale cuidarlos si me los destruyen… es broma, solo fueron algunas hojas). En fin, su tío (yo) de habilidad legendaria (en la vida real, no en el ciberespacio) les mostré cómo se debía lanzar un frisbee para que cayera en las manos (sin moverse) del contrario… (todo un arte) digo, ese es el reto; (tirarlo como loco y correr tras el: lo hace cualquiera... bueno, eso hacía mi sobrino cuando lo lanzaba). A ellos les sorprendió la curvatura que hacía hasta alcanzar el objetivo; Principalmente a la chiquita, quien parecía lanzar un disco romano (girando la espalda).

En resumen, "jugamos" (me tuve que quedar... casi me explotan el vidrio del carro) como dos horas y media, incluso, hasta entrada la noche; y, entonces, en uno de esos tiros “imprecisos” de mi sobrino, me tocó hacer contorsionismo entre espinas y, claro, me comenzó a doler el trapezoide derecho (se me encogió, por retorcerme como gusarapo). Y mi santa madre comenzó a relajarme de que ese era un deporte de niños, no de viejos (así los relajo a ellos). Pero, se me quitó a las pocas horas. Sin embargo, le dije a ella que la experiencia: no se improvisa. Recuerdo que mis primeras canas fueron a eso de los trece años, hoy tengo cientos (a las mujeres le gusta... salvo que algunas "mayores" me tiran también el ojo). Sin embargo, hace unos días noté que tengo unas diez cien canas en la barba y dos en el bigote... algo nuevo; eso, debe ser la manifestación de la sabiduría (jajaja)... nota: un hombre serio JAMAS se tiñe el pelo.

Este día, me recordó cuando la amistad era pasar un buen rato de sano entretenimiento (sin electrónica), el amor estaba bien cerca (la hermosa vecina) y no había nada de qué preocuparse más de que el tiempo fuera "lento" (y nos cuidaban)... solo que, esta vez, quien cuidaba: era yo. Así termino los 12 posts de febrero... me quedaron algunos temas pendientes, ya los escribiré.

P.d. La imagen del perrito, es una representación del perro del edificio del lado. Estaba como loco por jugar; o, era, por mordernos (espero que nunca salte de la tercera planta... quedaría: irreparable). 

26 feb 2015

Llegaste Tu - Luis Fonsi Ft. JLG


Pensaba que esta canción la había compuesto Juan Luis Guerra, debido a la melodía; pero, descubrí que fue compuesta por Luis Fonsi y Claudia Brant. Me gustó la canción, así que la comparto, ya que es una gran expresión del amor de familia.

También, agrego "Todo tiene su hora", de nuestro Juan Luis Guerra:


De nada vale ser impaciente!!!!

24 feb 2015

¿Vale la pena; o, el tiempo?




Hace unos días, mientras reparaba un pequeño radio/foco de emergencia que tengo, mi mamá, ansiosa porque le trasplantara una planta de zamia (que le floreció y fue un show “internacional”… a ella nunca le había florecido) me preguntaba con ironía: “¿Vale la pena?” (reparar el radio/foco) y, solo atiné a decirle: “quizás no, pero vale el tiempo”. Y es así, porque al ver la vida en cierta perspectiva, no hay nada más valioso para nosotros que el tiempo. Y es por ello, que lo más valioso que podemos obsequiar a alguien o algo es eso: nuestro tiempo.

Y, al examinar la pregunta en retrospectiva, puedo afirmar que aquella cuestión aplica al diario vivir. Las personas siempre se preguntan si tal o cual cosa valdrán la pena o el esfuerzo; cuando, la verdadera pregunta es: ¿Vale nuestro tiempo y dedicación?

Ese pequeño radio (análogo), es recargado mediante un dínamo, tiene foco y carga el celular en caso de emergencia... lo compré hace años (mentalidad preventiva… post apocalíptica (risa)) y es una herramienta muy útil que me ahorra molestias innecesarias (pérdida de tiempo) en casos de urgencias en la oscuridad. En este sentido, no es un simple radio, es mi foco de emergencia (alumbra como un auto), es un momento de música real (mientras reparo algo). Así que SI, valía el tiempo de desarmarlo con cuidado, de ajustar y de rearmar el condenado mecanismo para que funcionara al 100%. Al final, el led “defectuoso” estaba bien, solo era un falso contacto del conector.

Y lo gracioso es la perspectiva de la pregunta: al cuestionarnos sobre si algo “vale la pena” es casi seguro que subyace una visión negativa. Sin embargo, detrás de un “¿Vale el tiempo?”: se visualiza más una construcción lógica positiva. Y qué decir: soy un condenado reparador… mi naturaleza es la de: reparar las cosas... y las herramientas son la clave.

P.d. Multipliqué la matita de samia (que fue un regalo) en unas 50: también, soy buen matemático (multiplicando las cosas) jajaja... gracias a Dios, por el don.